Cinco detenidos del Caso Loan a la cárcel de donde escapó un temible narco este año
Durante el brindis de fin de año, Patricio Ruiz Díaz, apodado Señor Fusil, realizó una fuga espectacular del Complejo Federal 3 de Güemes, en Salta. Esto ha suscitado dudas acerca de la seguridad en la prisión. ¿Cómo pudo suceder esto?
Tl;dr
- Cinco detenidos por desaparición de Loan Peña serán trasladados a cárcel.
- Un narco peligroso se fugó de esta cárcel hace pocos meses.
- El caso plantea interrogantes sobre la seguridad en las cárceles.
- La justicia ordena el traslado a cárceles federales.
Detenidos en el caso de Loan Peña trasladados a la cárcel de un narco fugitivo
En una decisión que ha generado inquietud y debate, cinco de los seis detenidos por la desaparición de Loan Peña han sido enviados a una cárcel que recientemente fue escenario de la fuga de un narcotraficante peligroso. Este hecho ha suscitado interrogantes sobre las medidas de seguridad implementadas en los penales.
El narco fugitivo: Patricio “Señor Fusil” Ruiz Díaz
Patricio Ruiz Díaz, apodado “Señor Fusil”, era un recluso en el Complejo Federal 3 de General Güemes, Salta. Fue condenado a seis años de prisión, pero protagonizó una escapada cinematográfica durante el brindis de año nuevo. Desde el 3 de enero, el Ministerio de Seguridad ofrece una recompensa de 3 millones de pesos para quien proporcione información sobre su paradero.
Los detenidos y su destino
La justicia ha ordenado el traslado de los detenidos en el caso de Loan Peña a cárceles federales. Entre ellos se encuentran Daniel “Fierrito” Ramírez, Mónica Millapi, Victoria Caillava, el comisario Walter Maciel, Antonio Benítez y Carlos Pérez. Todos ellos, a excepción de Ramírez, que fue enviado a la Unidad 7 de Chaco, han sido trasladados al complejo federal 3 de Güemes, el mismo penal del que se fugó Ruiz Díaz.
Dudas sobre la seguridad de las cárceles
La fuga de Ruiz Díaz ha generado dudas sobre la eficacia de las medidas de seguridad en los penales. El narco logró escapar utilizando una escalera como puente para cruzar un canal de riego y, a pesar de la persecución, no fue recapturado. Esta situación plantea inquietantes preguntas sobre la seguridad y el control en las prisiones del país.
Opinión editorial
La seguridad en nuestras cárceles debe ser una prioridad absoluta. Si los criminales pueden escapar tan fácilmente, no solo se pone en riesgo a la sociedad, sino que también se mina la confianza en nuestro sistema judicial. Es imprescindible realizar una revisión exhaustiva y tomar medidas correctivas para evitar futuras fugas y garantizar la seguridad de todos.