Batalla intensa entre dos provincias por planta de GNL de US$40.000 millones
Buenos Aires y Río Negro compiten por un proyecto de desarrollo de Gas Natural Licuado, una colaboración entre YPF y la malaya Petronas. El futuro de la Ley Bases es un factor crucial en esta disputa. ¿Quién saldrá ganador?
Tl;dr
- Debate sobre la ubicación de una planta de Gas Natural Licuado en Argentina.
- Buenos Aires y Río Negro son los candidatos para acoger la planta.
- El proyecto está ligado a la aprobación de la Ley Bases por el Congreso.
- La planta es una de las “mayores obras de infraestructura” en la historia argentina.
Una lucha por la energía
En un clima de intensa negociación política, emerge un debate fundamental para el futuro energético de Argentina. En juego está la ubicación de una planta para desarrollar Gas Natural Licuado (GNL), un proyecto de gran escala que promete cambiar el panorama energético del país.
Buenos Aires contra Río Negro
Las provincias de Buenos Aires y Río Negro son las principales candidatas para acoger la planta. Ambas buscan aprovechar el potencial de esta obra de infraestructura, calificada como una de las más importantes de la historia argentina. Liderado por las petroleras YPF y Petronas, el proyecto representa inversiones de entre US$30.000 millones y US$40.000 millones desde 2025 a 2031.
La decisión final sobre la ubicación de la planta no solo dependerá de las negociaciones entre las provincias y las petroleras, sino también de la aprobación del Congreso de uno de los puntos clave de la Ley Bases. Como afirma el presidente de YPF, Horacio Marín, “Sin RIGI, no hay GNL”.
Importancia estratégica
La planta de GNL tiene más que un valor económico. Su ubicación y desarrollo están ligados a la geopolítica nacional y a la estrategia de crecimiento de Argentina. Esto se refleja en las palabras del ministro de Gobierno de Río Negro, Federico Lutz, quien afirma que “debemos analizar la inversión en materia de GNL también en el marco de la geopolítica nacional”.
La decisión final sobre la ubicación de la planta será determinante para el futuro energético de Argentina. Pero más allá de su importancia estratégica, el proyecto también representa una oportunidad para el desarrollo económico y social de las provincias involucradas.
Opinión editorial
Esta disputa por la ubicación de la planta de GNL es un reflejo de la importancia de la energía en nuestro futuro. Pero más allá de la lucha entre provincias, debemos recordar que el verdadero objetivo es el desarrollo sostenible de Argentina. La decisión final debe basarse en lo que es mejor para el país, no solo en términos económicos, sino también en términos de seguridad, medio ambiente y justicia social.