Sin plan del Gobierno para distribuir alimentos almacenados, advierte el juez Casanello
El magistrado persiste en su demanda de distribuir los productos almacenados en depósitos, a pesar de las controversias sobre el exceso de productos y la disminución del Capital Humano. ¿Logrará tener éxito en su propuesta?
Tl;dr
- Crisis gubernamental por alimentos próximos a vencerse.
- Exsecretario de Niñez y Familia, Pablo De la Torre, fue despedido.
- El Gobierno no presentó un plan de distribución de alimentos.
- La oposición critica la gestión de la crisis.
Escándalo en el Gobierno de Javier Milei
En un giro de eventos recientes, el Gobierno de Javier Milei se encuentra en medio de un escándalo político. Se descubrió que una gran cantidad de alimentos estaban almacenados a punto de caducar. El hallazgo ha desencadenado una crisis interna que resultó en la destitución del exsecretario de Niñez y Familia, Pablo De la Torre, cuya responsabilidad recaía en la cartera de Capital Humano, dirigida por Sandra Pettovello.
Incumplimiento de deberes
El Gobierno confiaba en una apelación a la fecha límite impuesta por la Justicia para la distribución de los alimentos. No obstante, el juez Sebastián Casanello ha señalado que el Gobierno no ha cumplido con la presentación de un plan de distribución de los alimentos almacenados. Este incumplimiento ha provocado críticas de la oposición, con el dirigente de Patria Grande, Juan Grabois, acusando al Gobierno de “jugar con el hambre de la gente”.
Reacciones y consecuencias
La polémica ha llevado a Capital Humano a reconocer la existencia de los alimentos cercanos a su fecha de caducidad. En respuesta a la crisis, el Gobierno ha despedido a De la Torre y presentó una denuncia contra él en la Oficina Anticorrupción. El Ministerio de Capital Humano ha anunciado un “protocolo para la entrega inmediata” de los alimentos por medio del Ejército Argentino, al tiempo que apelaba a la decisión de Casanello de una “distribución inmediata” de la mercadería.
Opinión editorial
La crisis actual es un llamado a la reflexión sobre la gestión de nuestros recursos y la responsabilidad gubernamental. No se trata sólo de una cuestión política, sino de una cuestión de justicia social y moral. Es imperativo que se tomen medidas para que estos errores no se repitan, y que se sancione a los responsables de este despilfarro. La ciudadanía merece un gobierno que garantice la distribución equitativa de recursos, especialmente en tiempos de necesidad.